PARTE II
Cerebro: -Pero, ya has pasado por esto ¿De verdad quieres caer otra vez?
Corazón: -Claro, cada vez que sea posible.
Cerebro: -¡No sabes lo que estas diciendo!
Corazón: -¿Acaso te ha poseído el miedo?
Cerebro: -Miedo, ¿miedo yo? ¡Es precaución! Solo te estoy defendiendo.
Corazón: -No te alteraría tanto si no fuera verdad. Yo no he pedido que me defiendan. Te estas poniendo muy emocional.
Cerebro: -Y tú, no eres bueno para recordar pero yo sí. Nada se ve claramente, se siente uno a morir.
Corazón: -Pero también todo lo que se escucha es muy positivo y huele bien.
Cerebro: -¿Qué, no has aprendido nada?
Corazón: -Eres tú el que no ha aprendido nada. No recuerdas lo feliz que te sentías y lo saludable que estabas.
Cerebro: -¿Y cuándo todo se acaba?
Corazón: - Ahí entras tú para aprender y hacerlo cada vez mejor.
Cerebro: -No me convences.
Corazón: -No estoy tratando de convencerte, tú tomaras muchas decisiones pero lo del enamoramiento lo decido yo.